Margarita,
tu de mi no te acuerdas, pero allá por el año 84 fui a visitarte al CBM y pedirte ser "becario" en tu grupo. Me volvía loco la biología molecular y te idolatraba desde tercero de carrera (CC Biológicas en la Universidad Complutense).
Me recibiste con agilidad, con simpatía, y con cariño me dijiste "Estas todavía en 3º y o te dedicas a mejorar tu expediente académico o no podrás optar a ninguna beca. Así que estos 2 años que te quedan... ponte a estudiar".
Y claro que te hice caso. Mi expediente mejoró en los 2 años que quedaban de carrera más de 1 punto. Gracias Margarita, porque efectivamente eso fue crucial para poder optar a una beca.
Surgió la Inmunología de por medio y me dejé enamorar por ella. Pero cada vez que te leo, que te veo en una entrevista, que te escucho en la radio... te recuerdo en aquel despacho. Con esa cara seria, pero amable, y tus sabias palabras.
Se me hace duro leer cómo te ha tratado este país... un abrazo enorme. Y gracias, siempre
Margarita Salas: «Cuando era joven me discriminaban por ser mujer, ahora me siento discriminada por ser mayor»